Por: Francisco Javier Serrano González
De la unión de dos palabras griegas – oikos que significa “nuestra casa” y logos que significa “tratado o estudio”- nació la ecología, una rama de la biología dedicada a estu-diar a los seres vivos, el ambiente que los acoge y la interacción entre ellos.
Cada 1º de noviembre, es el Día Mundial de la Ecología, una fecha importante para reflexionar sobre nuestras actitudes y estimular el cuidado de nuestro mayor hogar: el Planeta. Por eso, reunimos algunas prácticas responsables que, de manera simple y eficaz, te ayudarán a cuidar la Tierra:
•¡Disminuye el uso de plástico! Puedes empezar por no utilizar bolsas plásticas en el supermercado. Evita también utilizar platos, cubiertos y vasos de plástico.
•¡Separa los residuos y deposítalos correctamente! De esa mane-ra se facilita el reciclaje de los mismos, evitando que se acumulen en los vertederos. Acuérdate también que reutilizar es imprescindible para contribuir con el medio ambiente, por eso, analiza los materiales antes de botarlos y descubre cómo puedes regalarles una vida nueva.
•¡Cuida del agua! Rectifica que los grifos de la casa no tienen es-capes y fugas. Disminuye el tiempo en la ducha y reutiliza el agua. Lo que sobra de la lavadora, por ejemplo, puede servir para lavar los pisos del patio.
•¡Disminuye el uso del automóvil en tu vida! La bicicleta es un medio transporte eficiente, saludable y que no emite gases en la atmosfera. Cuando necesites desplazarse más lejos prefiere el transporte público. Un autobús, por ejemplo, lleva más personas que el coche, ocupando tres veces menos espacio en la carretera y emitiendo mucho menos CO2 en la atmosfera.
•¡Haz de tu hogar, un hogar más ecológico! Prefiere los elec-trodomésticos que consumen menos energía, apaga las luces y desenchufa aparatos electrónicos cuando no los estés utilizando. Uno de los primeros pasos para empezar es cambiar tus lámparas normales por lámparas de LED que tienen una mayor vida útil y consumen menos energía.
•¡Mantiene la naturaleza cerca de ti! Nada mejor que el contacto con la naturaleza para recordar la importancia de cuidarla, por eso, prefiere paseos al aire libre y si puedes, cultiva la tierra. Puedes hacerlo en un huerto o jardín, o existe la opción de pequeñas macetas para aquellos que no tienen tanto espacio.
• ¡Conoce el origen de los productos que utilizas! Infórmate siempre del proceso de los productos que consumes y prefiere aquellos que son producidos de manera responsable con el planeta. Existen va-rios blogs donde encontrarás toda la información sobre la cadena sustentable que existe detrás de los productos, desde las comunida-des proveedoras de activos y su extracción sostenible, pasando por la relación y participación en los beneficios, hasta las Tecnologías Verdes desarrolladas en los embalajes y materias primas.
Te invitamos a llevar a la práctica estas acciones día con día, buscar información para ampliar tus conocimientos sobre el cuidado de la Tierra y, sobre todo, compartirlo con tus amigos, familiares y veci-nos. Con el trabajo de todas y todos podremos conservar nuestro gran hogar: El Planeta.